Aprende a cuidar de tus utensilios de cocina de acero como el wok sin dañarlos.
La capa protectora
Este Wok es de acero al carbono, el material original con el que se fabricaban los woks, y el preferido por los restaurantes que mantienen las costumbres y tradiciones en la cocina.
El acero al carbono es fácilmente oxidable, así que en la fábrica, antes de enviar los woks, los recubren de aceite de colza (apunte: el aceite de colza no es tóxico; el escándalo de 1981 fue debido a aceite desnaturalizado y de hecho el aceite de colza se consume en todo el mundo). Al ser acero al carbono, el propio carbono del acero tiñe el aceite dejando una capa de aceite negro en el wok. Esta capa no es dañina en contacto con la comida pero recomendamos limpiarla al menos en parte antes de utilizar el wok.
Recomendamos frotar el wok con un estropajo metálico con una solución de bicarbonato sódico y limón en agua, y aclarar con agua. Como se ve en el vídeo, este proceso se debe repetir varias veces hasta que el wok pierda el color negro, aunque siga tiñiendo un poco de color negro si pasamos un dedo o papel por su superficie, por el carbono del acero (mancha como el grafito).
Si no se va a hacer el proceso de curado inmediatamente después de limpiar el wok, recomendamos untarlo con aceite.
Mientras el wok no esté curado, es normal que siga tiñiendo un poco el aceite con el que se unte.
Antes de utilizar tu wok: el proceso de curado
Antes de utilizarlo, un wok de acero al carbono se debe curar para evitar que los alimentos queden pegados al mismo. Buscando «curado de wok» o «wok seasoning» en el buscador se puede encontrar mucha información respecto a como llevar a cabo este proceso. Recomendamos especialmente el vídeo sobre cómo curar un wok de School of Wok.
En el canal de School of Wok hay más vídeos interesantes sobre cómo mantener y cuidar tu wok.
Limpieza general
Recomendamos limpiar el wok llenándolo de agua y haciéndola hervir mientrar lo rascas con una espátula metálica, sin utilizar jabón. Una vez esté limpio y enjuagado, hay que secarlo completamente para que no se oxide. La mejor manera de secarlo es al fuego o en la vitrocerámica, y a continuación con un trapo.
No limpiar el wok en el lavavajillas.
Antes de guardarlo, es recomendable untar la superfície superior con un poco de aceite para protegerlo de la oxidación.
En el siguiente vídeo podéis ver cómo limpiar vuestro wok.